07 febrero 2010

Viaje de ida



La cena se presentaba muy concurrida. Poco a poco empezaron a llegar desde los más apartados lugares, familiares y amigos que ocuparon con sus coloridos atuendos cada ángulo del salón.

Con el primer vino y a un gesto del anfitrión, la sala quedó en silencio: ¡Amigos!, dijo animado, voy a emprender un viaje importante; de vez en cuando conviene ausentarse para conocer mundo. Os he convocado a esta cena para despedirme de vosotros. Ignoro cuándo volveré. Deseo que seáis muy felices y espero que nos veamos pronto. Cuando concluyó su alocución una mueca de zozobra nimbó su rostro.

Sonrisas de circunstancias, amagos de breves inclinaciones de cabeza, gritos de asombro. En algunos rostros se adivinaba cierta preocupación. En los corros se sucedían los cuchicheos; los chascarrillos saltaban de mesa en mesa; cada comensal aventuraba una solución para aquel enigma.

Al poco tiempo llegó el segundo brindis al que siguieron varios más: ¡Amigos, brindemos por el futuro! Las copas se alzaron sobre las cabezas como movidas por un resorte y al chocar unas contra otras semejaban un galope desbocado de caballos. Los desconcertados comensales se miraban con la esperanza de encontrar una explicación en los rostros vecinos.

De pronto, el péndulo del gran reloj del salón hizo sonar las campanas como un veredicto. El anfitrión abandonó la copa sobre la mesa y sin mediar palabra avanzó resuelto hacia la puerta principal acompañado en todo momento por las miradas de la concurrencia y un breve murmullo que murió en un silencio sordo.

El jardín se fue llenando de luz como si alguien hubiera encendido antorchas en cada esquina. Y conforme la luz se hacía más presente se escuchó un silbido como el de un motor en el cielo de donde se descolgó un extraño aparato luminiscente. El anfitrión se introdujo raudo por la escotilla abierta y el artilugio desapareció engullido por la noche rumbo a algún planeta ignoto y lejano.


19 comentarios:

Eliane dijo...

Prometeo: Me gustóel relato... con todas las incognitas!
Un abrazo

Carmen dijo...

Precioso relato y un desconcertante final.
Un placer como es habitual visitar este blog.

Saludos y mis felicitaciones por recoger tan bellas palabras

Xiomara dijo...

Prometeo increíble relato sentí la luz que engullía el ambiente del jardín…el sonido agudo del extraño aparato viajero… y con asombro me quede enraizada cuando el anfitrión se perdió rumbo a un incierto destino…me encanto leerte! Te dejo un beso

Ana Palacios dijo...

Las despedidas tienen un regusto triste y amargo.
No me gustan las despedidas pero esta no da tristeza sino que produce asombro.
Me gustó la entrada.
Abrazos

Ana Márquez dijo...

Muy buena prosa, amigo. Imágenes visuales que le otorgan realismo y verosimilitud. Siempre es un placer pasearse por tu isla :-) Un abrazo.

Leni dijo...

Me quedé tan desconcertada al final, como los comensales...jejeje

La seriedad del relato acaba con una sonrisa muy lejana...mucho.


Muy bueno Prometeo.
No dejes de sorprendernos.

Beso

Carmen Montoro dijo...

El título de este magnífico relato, se me hizo muy corto, nos da pié a pensar en una VUELTA. ¿Volverá nuestro intrépido viajero a relatar su odisea?

Me gustaría su regreso, y el detalle de lo vivido...

Saludos salados, amigo Náufrago!

madroca dijo...

Un placer leer textos como el tuyo, tocado con todos los ingredientes sin una sola respuesta, me ha gustado pasearme por tu blog y desde ahora lo hare m,as a menudo, también te invito a pasarte por "Destellos de Luna y viento" cuando quieras.
Un saludo

Sandra Gonçalves dijo...

belissimo texto.
Porem triste.
bjos meus!

ANRAFERA dijo...

Estupendo relato. Enhorabuena. Saludos PTB

P Á R M U L O dijo...

El otro día escribí un poema sobre náufragos y me acordé de tu blog.

PASATE POR:

www.lamansiondelpoeta.blogspot.com
Suscribete

Joha dijo...

Me gusto, me sentí ahí. Saludos desde mi pequeña Costa Rica.

María dijo...

Felicidades, me has mantenido espectante hasta el final... un relato impresionmante con final inesperado :-)... un saludo

Clara dijo...

Las despedidas producen tristezas,pero con está has logrado,incognitas y mucho asombro. To be continue.

Bss

LoReBeLLa dijo...

Me encantó, me gustaría saber qué le pasa en el viaje al protagonista.

MTeresa dijo...

Un bello relato,
viaje a lo desconocido
pocos se arriesgan,
nos hemos vuelto conformistas
y comodones y miedicas.
Bueno, hablo de mi, claro,
me place viajar segura
y con billete de vuelta.
Un placer leerte

kitty dijo...

Merece una segunda parte. Gran relato!
Saludos PTB
www.kitty-girl.info
www.artemery.enredado.org

Lola Padilla dijo...

Me llevo los puños apretando esos matices, me los llevo llenos de emociones.

Me encantó.

Prometeo dijo...

Muchas gracias