29 diciembre 2008

De profundis



Cuando era un chiquillo me contagiaron el virus de los ideales renacentistas y de la ilustración a través de las studia humanitatis.  Llegué a ser así pretendiente ingenuo de todos los saberes y amante oficioso de los innúmeros vericuetos recorridos por los humanos desde todos los puntos del vasto territorio de las ideas. Y eso, tarde o temprano tiene que doler. No me arrepiento, sino al contrario, estoy profundamente agradecido.

Uno procura no facilitar muchas pistas sobre sus andanzas por esos mundos de Dios  porque tras cada esquina acecha una caterva de contables que tiene como encargo redactar inscripciones expeditivas y ponerlas sobre la cruz (lignum crucis) de cada mortal. Ya saben, todos esos que han descubierto en el análisis del discurso una cuña, un pretexto y una herramienta que les es muy útil para descalificar a los que no piensan según lo que se ha dado en llamar lo políticamente correcto.

La infancia y la infamia. De todo ese mundo de la infancia, adolescencia y primera juventud proviene mi gusto por la antigüedad clásica, mi afán por las letras y mi curiosidad por el conocimiento en general;  y de los copistas de la infamia, mi descreimiento en los frutos de la inteligencia cuando está atacada de sectarismo, de mera simpatía generacional o anegada por el oropel de la moda.

Dos mundos siempre presentes que es preciso ponderar para tomar impulso,  en estos momentos en que  marcamos un hito en el año que nos dice adiós, una muesca más (en realidad menos) en los pliegues de nuestra vida que avanza; recordar el sedimento del pasado que se fue y del que somos deudores y descreer de los que hoy han hecho subir varios puntos los niveles de desprecio por las humanidades y de ataque abierto, incurriendo en flagrante delito porque ellos son los  responsables de custodiar los saberes.

“Cuando el mundo exterior asquea, hace languidecer, corrompe, embrutece, las personas honestas y delicadas están obligadas a buscar en alguna parte de sí mismas un lugar más limpio para vivir”, decía Flaubert en una carta dirigida a su musa Louise Colet.

Ese lugar está abastecido por las humanidades, hoy llamadas ciencias humanas:  literatura, historia, filosofía, antropología, el arte y demás recolección de la historia de la cultura y de los valores humanos y espirituales  en general.


“Las perlas forman el collar pero el hilo es el que hace el collar”
. Otra vez Gustave Flaubert. 




24 diciembre 2008

Feliz Navidad



No es una etiqueta ni un tópico vacío. Es un deseo intenso y una fórmula mágica que anida en tu memoria. Alguna otra expresión de mucho menos fuste pretendió suplantarla, mas se pudrió en el barro y tras un brillo efímero desembocó en hastío.

Feliz Navidad, amigos.

¡Hágase!







17 diciembre 2008

Vivir mata


Así es: no se conoce de ningún muerto que antes no haya estado vivo. Aunque sea, al menos, un poco vivo. Por lo tanto vivir, mata. Que se lo pregunten a un sepulturero.

Algunos incautos creen que con ponerse a salvo de posibles accidentes domésticos, circulatorios y de otro tipo consustanciales al hecho de vivir o de los eventuales ataques a la vida perpetrados por bandas de delincuentes se librarán del desastre. Pero de lo que se trata aquí es de dilucidar que el mismo hecho de vivir, mata.

Llega uno y te espeta aquello de: estás entrando de lleno en la crisis de los cuarenta, y eso duele. Y se queda tan fresco. O, tú mismo, un buen día vas y le encasquetas al vecino: cuídate que te veo muy susceptible, ¿no será que llevas a rastras la crisis de los cincuenta? Frases hechas. Claro que siempre hay alguien más chulo que nadie que va y dice: estoy en crisis desde que nací. Así se explica todo.

Nada más nacer, ya empieza el envejecimiento. Y a un ritmo de vértigo. Los incautos, narcotizados por los cuentos de la infancia y aturdidos por los cantos de sirenas de la adolescencia creen que eso de la muerte no va con ellos y malgastan sus años (qué digo, años: días y si me apuran, horas) en juegos malabares: espejismos que la misma vida se encarga de mostrar (o esconder) aquí y allá para hacer más llevadero el tránsito. Algunos no se dan o no quieren darse cuenta del evento inexorable que terminará sobreviniendo más temprano que tarde.

Así las cosas, ¿qué nos cabe esperar mientras llega la muerte?

Pues lo que llevamos haciendo durante siglos, desde que el mono es hombre y el vino, agua: escudriñar con asombro el infinito; realizar con paciencia el inventario humano de los horrores y de las maravillas; encajar, con aplomo, los golpes despiadados; caer en el asombro y la fascinación de los amaneceres dulces y de los tibios arreboles de la tarde; compartir las alegrías y las penas que sobrevienen de cuando en cuando para no saturarnos del todo de las risas o de los llantos; disfrutar de la calma y el sosiego; reflexionar sobre este viaje extraño y maravilloso que es la vida; emocionarnos, sentir, danzar, cantar, soñar crear. Y poco más. Y poco menos.

Vivir, mientras llega la muerte y el camino se angosta. Vivir, sólo vivir. ¿O prefieres, curiosa Lot, volver la mirada y quedar como estatua de sal?



Esclavos de una ilusión from Fran Palazon on Vimeo.

14 diciembre 2008

Alma de blog IV


- - - - - - - - - - - - - - - - - - Acantilados de Dalí - - - - - - - - - - - - - - - - -

Hoy he dedicado un par de horas a navegar sin rumbo prefijado, baliza va, boya viene, por la blogesfera que es ya como un océano sin orillas. He buceado por entre unas cuantas decenas de blogs con ánimo de descubrir alguna perla. No sé cómo lo hace el resto de los mortales pero es realmente difícil localizar blogs interesantes. Y cuando das con uno que apunta maneras lo encuentras abandonado, desactualizado o muerto. ¿Millones de barquichuelas a la deriva? Bien es cierto que apareció alguno interesante.


Hace poco descubrí que tenía un moderado temor a los espacios cerrados en general. Hay una imagen que me ronda y me produce algo así como un ataque (también moderado) de ansiedad. Imagina, lector, la siguiente escena: un organismo vivo prisionero en un espacio oscuro, silencioso y hermético. La información del exterior le llega a través de las impresiones de terceros que tras captar cada uno determinadas sensaciones según su especialidad, las codifican y las envían al ordenador central para que éste se encargue de procesarlas, decodificación mediante. Tal que así, más o menos, actúa ese prodigio llamado cerebro. ¿No te pone nervioso pensar en ello? Pero no se trata sólo de las consecuencias del enclaustramiento sino de las segundas manos: el mundo que conocemos es una interpretación reformulada y reinventada por cada uno de nosotros. La idea no es nueva, pero sí certera.

Tantos mundos como cerebros. Y no se trata sólo de que noventa y nueve ovejas y un pastor sumen cien cabezas como vacilaba el guasón, sino que cada una de las barquichuelas evoca por la proa puertos diferentes. Lo que nos lleva, una vez más, a constatar las dificultades de la comunicación humana.

Millones de blogs en un océano multicolor. ¿Cada uno encuentra lo que busca? ¿Son o nos lo parece? Un continuo ir y venir, encuentros y desencuentros, en un eterno juego de espejos, de luces, sombras y contraluces. Y a veces la playa es un acantilado.

Y aún así...

13 diciembre 2008

¿Y esa rosa?



Des ombres et des lumières...

...les chemins qui nous portent à un lieu appelé l'espoir.


¿Se puede escribir un bello poema en medio de una batalla?

Azpeitia demuestra, una vez más, que sí. Que la poesía no es un artilugio prescindible sino un bien necesario. Poesía para respirar. Poesía para vivir.

Un camino llamado libertad.

11 diciembre 2008

Paradojas y democracia


Parece que hay unanimidad en considerar la democracia como el mejor sistema político. Un invento muy antiguo que, sin embargo, lleva cosa de un siglo en proceso de generalización, tras la debacle de sus principales competidores: la teocracia y el totalitarismo y sus vertientes, una de la más importante, el comunismo. La democracia, triunfadora en esa contienda se enfrenta, no obstante, a peligros importantes.

El enemigo principal de la democracia que la hace tantas veces frágil lo encontramos dentro de ella misma. La democracia se sustenta en un cuerpo legal, pero si los gestores actúan con miedo a cumplir y hacer cumplir esas leyes, si son tibios, si hacen dejación de sus funciones, si por no meterse en líos prefieren que la inseguridad arraigue en la sociedad, si se dedican a poner palos en la rueda a las mismas leyes, su fortaleza se debilita cada día más y está condenada a ser el pim pam pum de la delincuencia organizada (nacionalista o no) y las mafias de todo tipo, incluso de los chiquilicuatres que hacen de la calle su campo de juego para aprender a ser… mafias organizadas o delincuentes francotiradores un mañana no tan lejano.

Se ha puesto de moda la expresión tolerancia cero. Pues bien, tolerancia cero con las mafias, con los grupos terroristas, con el vandalismo callejero, con la delincuencia organizada, con los ataques a la propiedad de la gente, llámese movimiento ocupa o chorlitos sin fronteras. Consideración a los derechos de los ciudadanos, educación para la responsabilidad, respeto a la libertad, abandono del relativismo social ramplón e inconsciente y aplicación de normas y responsabilidades para todos… Y manos que no tiemblen para hacerlas cumplir.

Demasiada tolerancia con los delincuentes y muchos tiquis miquis con los defensores del orden; demasiado cachondeo con las normas de funcionamiento de una sociedad y demasiada comprensión con los transgresores sociales que son considerados y tratados como héroes en demasiadas ocasiones. Leyes para todos. A la cárcel con quienes las conculquen, se trate de pepico o de lehendakarico. Casos tenedes…

En el pasado una organización social se defendía con la fuerza de las armas. Duraba lo que duraba su fortaleza y adiós. Hoy lo deseable es el imperio de la razón y de la ley. Pero todo eso hay que creérselo y aplicarlo con decisión y sin titubeos. Si las leyes garantes del funcionamiento del sistema democrático no se aplican, se conculcan en algunos casos, se edulcoran en otros por temor a desagradar a ciertos grupos, ¿cuánto durará el tinglado? Mal aspecto tiene el enfermo…

Es triste que la mediocridad, otro gran enemigo de la democracia, se haya instalado de tal modo en la sociedad que se tache de sospechoso y se mire con desdén al que destaca. La vulgaridad, la delincuencia, la chabacanería y la mediocridad ocupan un espacio destacado en los medios de comunicación. Si el medio era el mensaje, ¡qué cosa son los dueños de esos media?

Remedando el refrán: en demasiados ámbitos la zorra se ocupa del cuidado de las gallinas.

Y así nos va.

09 diciembre 2008

Llueve...




Los fulgores de estío se agitaron en los charcos de otoño de camino al invierno...

Y ahora el agua tiembla en cada gota cuajada del frío y la nieve que acechan.













08 diciembre 2008

Espíritu y letra



Mi letra es ilegible, los médicos me envidian. Con el ordenador es diferente, puedo ensayar diferentes tipos si bien el que más me gusta es el que simula la letra manuscrita. Se cierra el círculo. Llegué a ser legible por el ordenador.

Un lunes extraño. Es lunes y festivo; como si se tratara de un domingo que a la vez es la víspera del martes. Se precipita la rueda de los días y se recorta la semana. Uno, dos y tres.

Ocho de diciembre, bajo el oropel de la semana fantástica, la relativización de los valores y un mal entendido y errático carpe diem, todavía se perciben los rescoldos humeantes de la Navidad que llega puntual a la cita y ya casi está aquí. Donde hay, siempre queda.

Algunos arquitectos de la nada han pretendido sustituir a los Reyes Magos de la infancia por un advenedizo Santa Claus. Pero resulta que Papá Noel, Santa Claus, San Nicolás, no son sino hojas de un mismo árbol que hunde sus raíces en un personaje legendario inspirado en un obispo cristiano del siglo IV de nombre Nicolás. Cerramos el círculo y estamos en el mismo sitio.

El amén y el om. Dos mantra de dos culturas bien diferentes y diferenciadas. El chiste es que algunos abandonaron sus creencias de antaño y se entregaron devotos a otras venidas de oriente (como los Reyes Magos). Donde antes despotricaban ahora muestran unción. Donde antes criticaban imágenes, rezos y ritos, ahora (a calderadas), se solazan en la ornamentación de estancias completas con profusión de figuras (algunas terribles), velas, inciensos y ejercicios casi gimnásticos. Fieles a la máxima que afirma que el santo, cuanto más lejano, más milagroso.

Es lunes y domingo. Va a ser eso.

06 diciembre 2008

Enciclopedia de la idiotez


Y, claro, fue todo un hallazgo cuando descubrí lo que Flaubert se llevó entre manos toda su vida como idea recurrente que le persiguió desde la niñez: elaborar algo así como un diccionario enciclopédico: Dictionnaire des idées reçues, le llamó él, que en España se publicó con el nombre de Diccionario de los lugares comunes.

Flaubert nunca terminó su obra, Bouward y Pécuchet, donde aparece incluido el diccionario. Su objetivo fue dejar al descubierto los tópicos que, según expresó en diferentes ocasiones, son un lodazal para la inteligencia. La democratización del saber conduce a la generalización de saberes superficiales, según Flaubert. O dicho de otro modo: el conocimiento progresa pero la idiotez también. Y crece y se agiganta. La palabra se convierte así en un simple depósito de lugares comunes, y Flaubert se aplica a hacer el inventario de esos
tópicos.

Hoy, Internet es como un caballo de Troya en el interior de las conciencias que contribuye de forma poderosa y nunca sospechada por Flaubert a la generalización del conocimiento. Y también de la necedad. Hay tantos jugadores de ventaja de las palabras que se encargan de despojarlas de su aliento de vida (élan vital) para convertirlas en un saco, cáscara o mero depósito, que la lucha se presagia encarnizada.


P.D. Entradas, a modo de ejemplo, del diccionario de lugares comunes de Gustave Flaubert:


Calvicie.- Siempre precoz, la causan los excesos de juventud o la concepción de grandes pensamientos.

Derecho (el).- No se sabe qué es.

Desierto.- Produce dátiles.

Diamante.- ¡Se terminará por producirlos artificialmente! ¡Y pensar que no es más que carbón! ¡Si lo encontráramos en su estado natural ni siquiera lo recogeríamos!

Diccionario.- Decir de él: "Esta hecho para los ignorantes".

Economía Política.- Ciencia sin entrañas.

Higiene.- Siempre debe ser mantenida correctamente. Evita enfermedades cuando no las causa.

Imbéciles.- Quienes no piensan como uno.

Laconismo.- Idioma que no se habla ya.

03 diciembre 2008

Malditos




Las alimañas han vuelto a actuar. Hoy no queda espacio para la poesía, ni para la triangulación de la belleza.

A quienes les justifican, les amparan, o a quienes siempre encuentran alguna triquiñuela verbal para comprender a los bárbaros del norte; a quienes no hacen lo suficiente para acabar con la peste: malditos todos ellos.

02 diciembre 2008

Triángulo


Esto ocurrió hace unas horas, un poco antes de que Venus se escondiera tras la Luna en presencia de Júpiter. Lo siento pero mi cámara no da para más, si bien la vista en directo era espléndida.





















01 diciembre 2008

Insomnios


Retardan los relojes sus latidos
en mustia amanecida del insomne.
Rebotan por la calle los sonidos
y las sábanas aflojan sus barrotes.

Se acicala la noche con sus tules
y campanas ensayan su repique
¿qué despierta al dormido tan temprano?
¿quién atiza las llamas de la aurora?

Los corceles del alba andan veloces
por caminos de fuego entrecruzados
mientras el horizonte del insomne
amanece a unos ojos ya cansados.

¿Qué será de la tierra sin la lluvia?
¿Qué del polen sin los vendavales?
¿Quién despertará la madrugada?
Mientras el insomne bulle y vela.

Los gallos citarán a voz en cuello
horas tempranas que ya nadie guarda
sólo el insomne verá su destello:
ya llega el día, que la noche escampa.



30 noviembre 2008

Matalambú


Primero fue la lengua que prodigó los nombres a pertrechos de infancia;
luego llegaron números, fábulas y saberes, calculada añoranza.
Bajo toda esa mole, sobre toda experiencia,
surgió la voz genuina, sonó palabra mágica
como una exhalación, un
¡hágase! solemne:
matalambú.

Y esa fue su cosecha, su contribución a la vida, y su misterio.

29 noviembre 2008

La banda del focus


Hace un par de días cerca de donde escribo se perpetró un atraco de película en una Caja de ahorros: disparos al aire, ¡todo el mundo al suelo!, agresión al director de la entidad para que facilitara la clave de la caja, huida con rehenes, disparos contra la policía que acude a las inmediaciones del banco y que repele el ataque. Los atracadores iban fuertemente armados y contaban con antecedentes policiales. Resultado del atraco: un atracador muerto, tres heridos (dos graves, un policía con un disparo en la mandíbula y el otro atracador), 31 disparos y 12 rehenes. Hasta aquí los hechos.



Tras el lógico revuelo inicial empiezan a escucharse los comentarios de rigor: que si por qué han tenido que matar al delincuente, que si no hacía falta tanto, etc.

Sorprende cómo alguna gente está predispuesta a solidarizarse con los delincuentes antes que con la policía. Es curioso cómo algunos están, de hecho, más cerca de los maleantes que de quienes tienen la misión de velar por la seguridad de todos. Por algo será y por algo se empieza.

Padecemos las consecuencias de la sempiterna picaresca llevada a extremos injustificables que considera al delincuente más de fiar que al policía. Y eso es grave.

La calle, en muchas ocasiones repica esa estética cutre y putre(facta) a la que contribuye y refleja de manera tosca y jocosa, una canción del sexagenario y a pesar de ello adolescente cantautor Sabina que es capaz de meterse en la piel de todos estos sujetos:

Al Capone en Chicago, mercenario en Damasco, sultán en un harén, tahúr en Montecarlo, el más chulo del barrio, violador en tus sueños, morfinómano en China, desertor en la guerra,

Mientras que en este otro, ni de coña:

¿Policía? ni en broma, dice Sabina.

Eso es: burla burlando...

Pues bien, los atracadores de la banda del ford focus como eran conocidos, emplearon toda la violencia que pudieron y atemorizaron a los vecinos con su proceder. Y las diversas fuerzas policiales actuaron como se espera que actúen los guardianes de la seguridad de todos. Que esa intervención disguste a otras bandas de parecido jaez que pululan por las calles entra dentro de lo esperado; lo que no es normal es que los ciudadanos objeto de protección pongan peros a quienes, arriesgando su vida, nos defienden de las agresiones de los delincuentes.






25 noviembre 2008

Bailar sin música


Le ocurría a Luci que con poca música, bailaba. Y de ahí a dispararse como carabina de feria todo era uno. Entró en un blog y empezó a criticar esto y lo otro. Era su manera de bailar, lo que pasa es que se confundía de foro (o de baile). Para ella más que entre ser o no ser, el dilema se establecía en estos términos: o blanco o negro.

Es una de las primeras asignaturas que tiene uno que superar: se puede bailar con poca música o si me apuras con ninguna, pero no existe algo parecido a o blanco o negro. No hablo del relativismo ramplón que detesto. Si hasta los coches usan amortiguadores…

¿Bailamos?

23 noviembre 2008

El paraíso de Maldivas


Maldivas, un archipiélago de unos 1200 islotes de los cuales unos 200 padecen la compañía desaforada de los turistas. Las islas están rodeadas por un círculo de coral dentro de una cinta turquesa sobre un mar esmeralda: el paraíso. La cima más alta mide poco más de dos metros de tal modo que un tsunami con olas de un metro sería suficiente para poner en estado de alerta a sus poco más de 300.000 habitantes.


Las autoridades de las Islas Maldivas han lanzado la voz de alarma ante las catastróficas consecuencias del temido cambio climático que hace subir el nivel de los océanos: si no se cambia la tendencia de aquí a final de siglo, las Islas Maldivas pueden desaparecer del mapa.

Qué mal va este mundo cuando hasta el paraíso busca nuevo emplazamiento. No nos hemos repuesto todavía del tsunami bancario que hace que los ciudadanos de a pie tengamos que prestarles a los bancos a fondo perdido metiendo para ello mano de nuestra raquítica caja para rescatarlos del diluvio que viene y ahora nos sorprende esta otra noticia demoledora: el paraíso, si Dios no lo remedia, tendrá que hacer mudanza.

Ya no está muy lejos el día en el que tengamos que alquilar una parcelita en la luna para vivir tranquilos. Mientras tanto viviremos al este del edén






MALE, la capital con una población cercana a los 100.000 habitantes.

21 noviembre 2008

Cuando se ama



Qué fácil ser amante cuando se ama.
Y enderezar torcidos y adecentar la acera.

Cuando se ama, es fácil ser buen padre y buen amigo,
y aprovechar el tiempo en las estrellas.
Y es fácil ser buen hijo y buen soldado cuando se ama.

Qué fácil es cumplir las normas todas cuando se ama,
qué dulces las esperas, qué agraz la despedida.

Cuando se ama hasta los huracanes llevan brisas
y las noches estrellas y el trabajo belleza cuando se ama.

Qué fácil es seguir al corazón cuando se ama
Qué tristes las ausencias, que tiernas las miradas.

Cuando se ama no molestan las piedras de la calle
ni el color de tu abrigo ni el sabor de la aldea cuando se ama.

(¡Qué fácil es matar cuando se odia!)



18 noviembre 2008

El dialecto de la vida




Es el material del que se sirve el escritor para plasmar su arte, según reflexión sabia de Robert Louis Stevenson en sus Ensayos Literarios (Hiperión). Y sigue: la literatura está condenada a trabajar en mosaico con palabras limitadas. Las otras artes obtienen relieve, continuidad y rigor a través de ciertas supresiones negadas a la literatura: ninguna pincelada de jeroglífico, ningún empaste alisado, ninguna sombra inescrutable, como sucede en la pintura; ningún muro ciego, como en la arquitectura… Un maestro.

Y el otro, (León Felipe): Pero ¿qué están hablando esos poetas ahí de la palabra?
Siempre en discusiones de modista:
que si desceñida o apretada ...
que si la túnica o que si la casaca ...
¡Basta ya! La palabra es un ladrillo. ¿Me oísteis? ...

Dos definiciones de la materia prima del escritor: dialecto de la vida y ladrillo. Las dos parten de la misma metáfora en la construcción del universo poético. Hágase la luz en los siete días de la creación (con sus siete noches como diría el chistoso).

La blasfemia y la plegaria; cruz y cara, envés y haz, águila o sol (otra vez León Felipe). Y más: todo sirve con tal de que arda…

17 noviembre 2008

Robar un cuadro


- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Mcarmen - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

Y unos pájaros cantaban
cuando vi tu cuadro
y lo robé,
no pude evitarlo.

El robo fue delito y hecho está,
y tendrá su castigo,
pero he aquí el bello cuadro.

Si alguien diere con la autora
de tan precioso lienzo
no le implore perdón:
no me arrepiento.

16 noviembre 2008

Los pasos perdidos



Me crucé con ella en el corto pasillo entre las dos habitaciones de la casa. Era una mañana brumosa de noviembre y apenas nos rozamos con un expeditivo y somnoliento hola, ¿cómo estás? Al poco rato, el eco sordo de sus pisadas moría en el salón y entonces el pasillo recuperaba su rutina.

Por la noche soñé con ella. En realidad fue más que eso: coincidimos en un ensueño donde nuestros ojos ahítos de tristeza se besaron hasta el alba y en la intimidad de la alcoba nos entregamos a la pasión. Pero nunca en la vigilia intercambiamos una sola palabra sobre nuestros atormentados encuentros nocturnos. En el sueño, esa especie de alucinación tan real como la mesa sobre la que transcribo el relato de su recuerdo, se sucedía a través del pasillo un trasiego de cuerpos de una habitación a otra, un continuo trasvase de un alma a otra alma, enfrascados los dos en la borrascosa aventura camino a ninguna parte.

Recuerdo que en una de las idas y venidas me dijo: el amor es un invento de nuestra mente para hacer la soledad más llevadera. Y dejó caer mi mano como quien se resigna ante una revelación dolorosa. Y un poco más tarde se destapó con esto otro: el amor es un teatro con un único espectador; una representación que nos hacemos para olvidar que la niñez no volverá ya nunca más. Cuando le recordé que para el amor hacían falta al menos dos personas me lanzó una sonrisa de reproche y la oí decir: en realidad nos enamoramos del amor mismo. El amor es como un espejo: nunca vemos más que lo que hay reflejado al otro lado.

Días estériles sucedían a noches feraces donde yo la esperaba y ella aparecía más tarde o más temprano. De pronto su silueta se imponía a la negrura del pasillo, testigo reservado de nuestros encuentros nocturnos, y a mi se me sonreía el alma.

Pero un día el pasillo se llenó de un estruendo de muerte. Cuando llegué junto a ella encontré su cuerpo encogido en el suelo, inmóvil. Ni un pálpito ni un suspiro. Sus ojos como hielos me fijaban desde dos cuencas vacías. Desde entonces salgo a menudo a buscarla al pasillo por si vuelve.

15 noviembre 2008

Por encargo II



A estas alturas de la noche
, Juan Madrid, sopesaba la manera de hacer mutis y escapar por la puerta de atrás. El visitante se entretenía observando con minuciosidad los objetos en los estantes y aún habría entrado en cada uno de los aposentos a no ser porque Juan evidenciaba un nerviosismo morboso.

- Dice usted que el dueño de la casa la abandonó, dejó caer el visitante como quien no quiere la cosa mientras paseaba arriba y abajo del salón. ¿No le resulta al menos curioso? ¿Por qué extraña razón un hombre de éxito desaparece de la noche a la mañana y deja una mansión como esta en manos de un desconocido? Preguntó con una mueca que respondía a su pregunta.

Juan apenas acertó a esbozar algo así como un titubeo y luego tiró de audacia y se encaró al visitante: mire, o me dice usted a qué ha venido a estas horas o llamo a la policía. Se sorprendió de oírse decir aquello y estuvo a punto de derrapar en una sonrisa que no venía al caso.

Ricardo sonrió y sus ojos de águila brillaron como quien domina la situación. –Hágalo, estaré encantado, dijo resuelto, yo esperaré aquí. Y se dejó caer en el sillón donde solía acomodarse el dueño de la casa, dando la espalda a la puerta principal.

Esto es de locos: masculló Juan, deshecho en nervios. De pronto se recompuso y emprendió otra estrategia con ánimo de zanjar la situación de una vez: conocí a don Ernesto que así se llama el dueño de esta casa, -tanteó queriendo controlar la situación- el jueves en la presentación de mi último libro. Dijo que leía con fruición todos mis escritos, especialmente los de la serie de aventuras sobre los cárteles de la droga latinoamericanos. Y me invitó a trasladar mi estudio por unos días a esta su casa que no usaba, mientras él permanecería fuera en París para un asunto de negocios. No pude declinar la invitación ante tanta amabilidad. Eso es cuanto sé del asunto. Y ahora, ¿me va usted a decir qué significa su presencia aquí?

La excitación le había impedido percatarse de los últimos movimientos de Ricardo hasta que un fugaz destello llamó su atención. Se trataba del brillo de unas cachas de nácar de lo que no podía ser otra cosa sino un revólver Magnum 44 plateado que yacía sobre su libro, Despertar en Medellín. Éramos pocos…




De manera torpe y caótica se levantó de la silla e intentando ganar tiempo, ofreció algo de beber a Ricardo mientras él se embauló al gallete un trago largo de Macallan 1926 Whiskey que encontró en el mueble bar. Ricardo, por su parte, se administró una generosa copa que paladeó a placer en sorbos cortos y bien espaciados, como si fuera a ocupar toda la noche en amena charla.



Salir corriendo ya no serviría de nada. De manera que Juan Madrid se dejó caer en un sillón cercano al de Ricardo y observó la escena como lo haría un espectador en el cine.


Continuará en III

09 noviembre 2008

La flauta mágica


Cuerda...

Desde los albores de la vida aprendió a bailar al son de la música que le tocaban. Y hoy ya no era feliz.


Viento...

Un buen día acertó a pasar junto a un cañaveral y se fabricó una flauta. De la flauta salía un dulce sonido que embriagaba el valle con sus deleitosos ecos.


Y percusión...

Y tocó en la soledad su música al son de la cual otros muchos terminaron danzando.



07 noviembre 2008

¿Dónde está Azpeitia?

Desapareció y se llevó con él la poesía...



P.D. Hoy estamos de enhorabuena: volvió Azpeitia y con él su canción.





03 noviembre 2008

Alma de blog III: la cebolla


Parece ser que todo lo que se nos cuela por la ventana de los sentidos solicitando nuestra atención nos toca con un doble propósito. Lo que en un principio es información necesaria, posibilidad de aventura y descubrimiento de un mundo fascinante, se convierte con el tiempo en un extravío (desvío) de lo que en verdad importa. Algo así como el dedo que señala un objeto: no es al dedo al que hay que mirar sino al objeto.

Pues bien, determinados intelectuales manifiestan una actitud o pose que consiste en interpretar la realidad a la manera de una sinécdoque. Según esta interpretación parcial, observan la realidad como formada por una sola capa de la cebolla y se sienten en la obligación intelectual de negar las otras capas e incluso de tirar por tierra todo lo que se sale de esa chata visión del mundo. Es la esclavitud de la propia miopía (pose). En cierta medida todos adoptamos esa postura, cada uno de nosotros en su campo de actuación cotidiana, como queriendo deslindar, diseccionar, separar, especializarnos para comprender mejor, pero luego nos encontramos con un miembro desgajado del cuerpo y olvidamos el cuerpo al que iba unido y del que formaba parte: nos dejamos enredar, pues.

Frente a esta postura hay otra: la de quienes creemos que la realidad es más rica y más abierta a sorpresas, que admite matices y que en ella hay lugar para lo mágico, lo misterioso, lo sublime y lo que no se puede nombrar porque si se le pone una etiqueta, caduca. Un ejemplo ilustrará de forma clara lo que quiero decir: mientras para algunos el corazón sólo sirve para bombear sangre (eso es quedarse atrapado en una capa de la cebolla, en una especie de burbuja que excluye todo aunque su verdadera intención sea contenerlo todo), para los poetas el corazón es una metáfora de ricos matices y profundo significado. Esto último es tomar la cebolla entera.

Hay una cita de León Felipe que siempre me llamó la atención es aquella que dice lo quemaría todo. ¿Qué particular caída del caballo hace considerar fútil, insustancial los propios escritos de un autor cuando se acerca su final? Mi respuesta apunta a la teoría de las capas de la cebolla: tal vez el poeta intuye que ha estado rondando siempre por la misma capa y hay una cebolla completa que se le escapó. (No sólo los poetas, hay muchos otros escritores que, de una u otra manera, lo ponen de manifiesto)

Todo esto hace referencia a la escritura; por ejemplo cuando leo al desasosegado Pessoa, por ejemplo, me viene a la cabeza la dichosa cebolla: todo es cierto desde una determinada visión pero puede ser irrelevante desde otra. La gran piedra situada a mitad de la montaña es una nimiedad vista desde arriba. Por supuesto que todo lo que uno siente, observa, vive, aun lo pequeño y nimio es respetable y valioso. Por lo tanto no critico al gran escritor Pessoa.

¿Cómo se aborda toda la realidad? ¿Cómo se deshace el ovillo completo, la cebolla entera? Una cosa es cierta: si miramos siempre desde una misma ventana o respiramos por la misma herida, otros mundos nos darán la espalda.



01 noviembre 2008

El hipotequito

................ Fotograma de La Naranja Mecánica .......................


Le llaman así al presidente de la república independiente de su casa. Está jodido porque viene chunga la cosa esta de la extraña crisis que llegó a falta de nombre y apellidos. Nunca se vio nada igual. Estos días son como para no recordar jamás y sin embargo, el tal hipotequito, no va a poder olvidarlos nunca. ¿Cómo se comerá el turrón estas navidades? ¿Llegará con los piños intactos a las fiestas?

Lo cierto es que el hipotequito está alarmado. Y la solución propuesta a la gran movida, eureka va, eureka viene, todavía le propina otra vuelta de tuerca a su asombro de cada mañana: resulta que millones de españoles dejarán de hacer frente al pago de sus hipotecas, no por capricho sino porque el sueldo no les llega y ¿qué hace el gobierno?: inyectar liquidez a los bancos que como todo el mundo sabe tendrán que afrontar serias dificultades para hacer frente al papeleo del trámite farragoso que supone dejar en la calle a miles y miles de hipotequitos y tener que quedarse con sus viviendas, no sin antes liberarles, eso sí, de la pesada carga que habían de soportar cada mes. El beneficio del Banco Santander sube un 6,1% en el primer semestre, vomita un diario económico en la red;
lo dicho, los pobrecitos no tienen sucursal donde caerse muertos y había que rescatarlos de sus penurias. Los sentimientos humanitarios no deben perderse nunca…

Porque esa es otra: el currito de a pie es quien además tendrá que servir de jeringuilla para la inyección esa de liquidez a los bancos. O sea, el mismo currito que perderá su casa por no poder atender al pago de la hipoteca será quien inyecte liquidez desde su exhausto bolsillo a las arcas de los bancos que están las pobrecitas que dan pena. ¿A usted no le dan lástima? Pues hágaselo ver porque eso es síntoma de falta de patriotismo en la sangre.

Y digo yo que eso les pasa a los hipotequitos por no preocuparse del lenguaje ni de la etimología de las palabras ni de la semántica ni de otros menesteres igual de importantes. Abre el ojo, chaval. Veamos: hipotequito, o lo que es lo mismo, te-quito-el-hipo o te-libero-de-hipoteca-y-me-quedo-la-cartera y te dejo en la puñetera calle (consecuencia natural de lo primero). ¿Cómo lo ves? Pero tranquilo, hombre, que todo cuerpo con rabo tiene su cabeza en la otra punta y esto, como no podía ser de otro modo, tiene su parte buena: el banco te libera de la espada de Damocles que pendía cada final de mes en forma de recibo sobre tu cabezota amenazando con rompértela. Ahora ya puedes levantar la testuz que vas ligero de equipaje. Como nuevo, vamos. A cambio, (todo tiene un precio), también te exonera de la funesta manía de disfrutar de una vivienda en propiedad, que no creas que es tan importante en tu vida: dedícate, full time a la cría del caracol sin cuernos o a la cosecha del trébol de cuatro hojas y consuélate con el noble pensamiento de que es un gobierno con sensibilidad social el que lleva la ejecución a cabo (tu ejecución sumarísima, muchacho). Fuego amigo, buen hombre.

¿Quién dijo que los gobiernos y los bancos no se preocupaban del ciudadano de a pie? Gente malpensada la hay en toda comunidad de vecinos. En la vida, a veces, hay que hacer borrón y cuenta nueva. Y a eso dedican sus esfuerzos: hacen borrón con los hipotequitos y abren una cuenta nueva a quienes puedan avalar un sustancioso crédito.

Sonría para la foto, venga, y no me sea rencoroso.

31 octubre 2008

Cara y cruz




Los jóvenes la ignoran; otras veces la citan, coquetean con ella que les observa paciente y circunspecta.

Los mayores la temen, la respetan; juegan a negociar una rebaja, una demora…

Los ancianos conversan con ella cada mañana y cada tarde.

Cara y cruz; vida y muerte.

La muerte es la única consejera sabia que tenemos. Cada vez que sientas que todo te está saliendo mal y que estás a punto de ser aniquilado, vuélvete a hacia tu muerte y pregúntale si es cierto. Tu muerte te dirá que te equivocas; que nada importa en realidad más que su toque. Tu muerte te dirá: "todavía no te he tocado". Carlos Castaneda

29 octubre 2008

Noviembre en verso




Se disfraza de lluvias, presuroso, noviembre
con su túnica blanca de guata adormecida
y la justicia ciega de hoja de guadaña.
La hojarasca de otoño avanza diligente
entre arbustos desnudos y caminos vacíos
cubriendo con su manto las aguas del arroyo
que susurran melosas sus jácaras ardientes.

Llegó trapaz noviembre sin anunciar su arribo
y retozan feraces las nieves en los copos.
¿Dónde paró el verano y los sus oropeles?
Migrarán los vencejos y las cigüeñas blancas,
a otros cielos más limpios en tierras de carbón,
mientras de entre las piedras brotarán salamandras.
y anidarán los pechos suplicante perdón.

Que venga ya noviembre que los enamorados
esperan otra excusa para darse calor,
no digan que el otoño no les fue compasivo
mientras ellos tensaban con dulzura el amor.

26 octubre 2008

Por encargo I



Tantas veces había oído hablar sobre el vértigo del escritor ante la hoja en blanco que se inquietó porque hoy era él quien pasaba por ese trance. Juan Madrid, escritor por encargo, arrojó como al acaso en el bombo de su cerebro tres palabras extraídas al azar y esperó con paciencia el resultado. ¿Cómo es que para motivar una buena historia uno tiene que recurrir a semejantes triquiñuelas? –pensó. ¿Será que todo está en la mente y sólo hay que espolearlo?

En esas cavilaciones se entretenía cuando sonó, largo y molesto, el timbre de la casa. Comprobó por la mirilla que se trataba de un desconocido. ¡Qué disparatadas disquisiciones no fluyen, en los instantes previos a abrir la puerta, de la cabeza de quien recibe una visita inesperada!

- Buenos días, ¿está el señor de la casa? _preguntó amable el desconocido.
- El señor de la casa la abandonó hace ya muchos años. Hoy la casa está, por lo tanto, sin señor; como un perrillo sin amo o como una oveja sin pastor. ¿Y usted quién es y qué desea? respondió Juan, el escritor de encargo.
- Bueno, replicó el visitante, la verdad es que no sé si debo hablar con extraños.
- Para mí que el extraño es usted, arguyó el que estaba dentro de la casa.
- Ya ve que eso depende del punto de vista: yo soy un extraño para usted mientras que usted es el extraño en esta amplia, acogedora y señorial mansión por cuanto me ha confesado que no es el genuino señor de la casa, se explayó el visitante
- Oiga, oiga, no se haga líos. ¿Usted a quién busca?, preguntó Juan algo nervioso.
- Verá, dijo el enigmático visitante con una media sonrisa conciliadora, disculpe si le he puesto algo nervioso. No pretendo molestarle a usted que por lo demás ignoro de quién se trata. Permítame que me presente: mi nombre es Ricardo Santamaría y si es tan amable y me deja entrar en la casa le explicaré el motivo de mi presencia aquí.
- Bien; adelante, pase; pero por favor sea breve porque espero una visita, agregó el que estaba dentro.
- Muchas gracias, dijo el visitante mientras se desprendía del abrigo. Permítame hacerle una pregunta delicada, continuó. ¿De qué visita se trata? No me tome por osado ni por descortés; simplemente pretendo decirle..., titubeó, ¿qué le hace suponer que la persona a la que usted espera no sea yo mismo? ¿De quién se trata, si no es mucho preguntar?¿Tal vez su novia? ¿Un amigo? ¿Alguien a quien debe dinero?
- No creo que eso le incumba a usted que, por otra parte, tampoco yo sé de quién se trata, contestó molesto Juan.
- ¿Qué pensaría si le dijera que tal vez su vida dependa de la respuesta que usted pueda darle a mi pregunta? lanzó enigmático el visitante del abrigo.
- Juan comenzó a sudar. Con inquietud creciente se aplicó a mover objetos de un lado a otro de manara caótica como una forma de sofocar su nerviosismo. Por último balbució unas cuantas frases referidas a lugares comunes como el inicio de la temporada de lluvias y la turbidez de la noche. Estaba claro que pretendía ganar tiempo mientras ponía orden en las revueltas ideas de su mente.

El visitante, por el contrario, parecía ahora más seguro y se explayaba con un alarde sobre las predicciones meteorológicas para la próxima semana.
De pronto, el extraño encaró a Juan con ánimo de sacarlo de su laberitno y le dijo resuelto:

Le confesaré un secreto: después de ver los utensilios que emplea para su oficio, los libros dispuestos en los anaqueles y los apuntes y borradores sobre las mesas tengo la intuición de que usted y yo utilizamos el mismo sistema de trabajo. Ninguno de los dos mueve un dedo sin un encargo previo…

(Continúa en II)

25 octubre 2008

In memoriam



En el trasiego cotidiano de un hospital puede una paciente debatirse con la muerte de un infarto mientras le practican una operación de lo más sencilla y exenta de peligro.

Cables, pantallas y máquinas que controlan casi todo de casi nada. La especialización al poder y el muerto al hoyo.

21 octubre 2008

El abismo del tiempo



El carpe diem es una tentativa para evitar caer en el abismo del tiempo en el que todos nos precipitamos varias veces cada día. Como un boliche en la bolera vamos para un lado o para el otro. El tiempo, (como la mente), nunca está quieto. Parece quieto pero en un tris, rueda que rueda, tumbo que tumba, es pasado y se entretiene en perfilar muescas en el futuro. Da igual que la felicidad ponga alas al tiempo o que la desdicha lo llene de plomo. El presente es una mixtura urdida entre la reflexión sobre lo que fue y los proyectos que llegarán a ser.


El pasado como maestro o el futuro como posibilidad dejan al presente el papel de partero, o sea el que ayuda a alumbrar, inútilmente a veces, un rumbo nuevo para una vida en permanente tensión. ¿Qué es el presente, entonces? El presente pone en crisis toda enmienda y todo deseo. O es un simple dejarse ir que se pagará muy caro. ¿En qué momento sucederá eso? En cualquier instante en que se abra la brecha en el abismo del futuro.

20 octubre 2008

El último poema




El último poema
se ha de escribir con lágrima y con sangre;
se imprimirá sobre la losa de un sepulcro,
sobre la puerta de cada mundo,
y no será el poeta quien lo labre,
y no será el poeta quien lo empuje
que aquí no vive nadie.

¿Quién moverá ese verso?
¿Quién lo venteará desde una calle a otra calle?
Y es nadie.
¿Quién lo encerrará en su cráneo
que no le duela y lo abrase?
¿Quién lo vomitará de su boca?
Y es nadie,
que aquí no vive nadie.

El último poema
será un negruzco y violento vómito de sangre,
y no podrá ser bostezo
de blanca mano y suave,
que no habrá boca que grite
ni cabeza que lo amase,
que aquí no vive nadie.

El último poema
será un lamento grave de mortífera voz:
¡aquí no vive nadie?


Nota: se trata de uno de los primeros poemas prometeicos y data de hace unos 25 años.

19 octubre 2008

A-Foros II



Y prosiguió Bagatelas con la narración de los hechos:
Así fue, amigos, tras una vida de penurias por esos mares de Dios y después de arribar a todos los puertos y romper mil corazones; tras hollar una a una todas las rutas marítimas; después de décadas de fechorías he decidido... (tomó un trago de vino jumillano); he decidido... hacerme monje y retirarme al desierto. A falta de lugar más apropiado he elegido para mi retiro el desierto de Almería. Y quiero que ustedes vosotros sean los primeros en conocer tan importante noticia que marcará un antes y un después en mi vida. Como con cuchillo afilado de carnicero sajo en dos mi vida: una queda sepultada en el pasado y la otra empieza a dar sus primeros pasos. Y con un golpe certero y seco clavó con fuerza una navaja albaceteña en la madera de la mesa que crujió dolorida por el impacto.

Sonrisas cómplices brotaron de las caras de asombro y de sorpresa que pintaron el salón de alegres y coloridos acentos.

Pero aquí no queda la cosa; no. –prosiguió Bagatelas sin darse respiro- El asunto tiene estrambote. Después de ímprobas gestiones al más alto nivel he conseguido, (acérquense que de esto tengo prohibido hablar)… he conseguido que pronuncie los votos de novicio mi amado presidente José Luis Rodríguez, que deja el Gobierno a Sonsoles y a las niñas para retirarse él también al desierto a purgar sus muchos pecados junto a mi.

Un silencio impostado se adueño de El Corral de José Luis. La calima se disolvió en aplausos que terminaron por enternecer al novicio, Bagatelas, que a estas alturas y y a entregado reveló que su nuevo nombre sería fray plexiglás del eco sagrado, por su afición a las ventosidades. Y el de su amado presidente: fray simplicísima sonrisa (por razones obvias).

Los platos quedaron despejados y las copas yacían sin vida entre manteles sucios. Un murmullo recorrió el gentío como sunami: ¡Es él! Efectivamente, una sombra ágil avanzaba desde la puerta hasta el salón. Era Sarjoes, el amigo del alma de Bagatelas que también había decidido unirse al grupo para pasar sus últimos días en tan plácido y recoleto lugar, en las montañas de arena donde las tentaciones no encuentran asiento y el alma corre veloz al encuentro de su señor, entre bálsamos vaporosos, palabras que acarician los entresijos del espíritu, susurros angelicales, ecos misteriosos y visiones de otro mundo…


***

¿Quién se hace cargo de la cuenta? -preguntó una voz desde el fondo de la barra…

Por ahí anda Martes, contestó Mar-y juano pero dice que no lleva suelto.

No pasa nada, es amigo de la casa...

(Irys sonreía desde el umbral).

En recuerdo al foro Notetrago.com y a los foreros que lo hicimos (im) posible.

18 octubre 2008

A-Foros I



Empezó a desgranar cansinamente la historia de su vida en un foro que había descubierto como al acaso. Desde el principio levantó una gran expectación potenciada, sin duda, por el anonimato, el morbo virtual y unos hechos que rezumaban verosimilitud por los cuatro costados. El asunto fue subiendo de temperatura y la atención de los cientos de participantes, islas en un mar de nicknames, cabía en un puño. El de él.

Bagatelas se sentía como un héroe el día de la imposición de medallas. Su relato era tan agoniosamente triste que sacaba de quicio a Crecidita, media lengua. Mekachis, por el contrario, comprendía al protagonista, imbuida como estaba de una santa paciencia oriental…

Lo cierto es que Bagatelas levantó pasiones, hizo reír de emoción a los más cenizos del ciberespacio, provocó llantos en ojos vagos que salpicaron de lágrimas las pantallas de unos ordenadores que temblaron durante semanas.

¿Qué historia era esa? Hablaba de orfandades, zancadillas, cuestas arriba… y el desenlace, por chusco entre miserias, era para no olvidar.

Un buen día, ante el cariz que tomaban los acontecimientos, Thor-mentas quiso zanjar el asunto de una kedada y convocó a dos docenas de personas a sentarse frente a unas botellas de vino de Jumilla para regar una parrillada de verduras y mariscos en el restaurante murciano El Corral de José Luis.

Una cigala que había reaccionado tarde parecía querer escapar del plato de Thor que presidía la mesa junto con el otro anfitrión Leuwen. Mar-y-juano, paredro de Faemino (y Cansado), dormitaba ausente, con ese aire de simpático que está para llegar, mientras hacía comentarios jocosos sobre la huerta murciana y el periodo de las lascas… También estaba Antipotros venida allende la frontera y un poco más lejos, Tutifortunati que miraba con un punto de lúbrico desdén.

Se escanciaron las primeras botellas de buen vino y antes de que los efluvios hicieran mella en los comensales, nuestro protagonista Bagatelas tomó la palabra:

-Estamos aquí, comenzó grave, para aclarar de una vez por todas cómo concluye mi historia porque su desenlace es tan inesperado e increíble que no podía contarlo en el foro.

Jmk, suspiró profundo; sujetó del brazo a Aguerrido que daba muestras de impacientarse y ambos a dos esperaron con interés el desenlace de la historia triste de Bagatelas.

-En primer lugar, -prosiguió Bagatelas-, quiero dar las gracias a quienes han hecho posible este evento, tan impensable hace sólo unos días y que tanto me llena de satisfacción hoy. Tengo delante a personas a quienes nunca pensé mirar a la cara y hoy lo hago complacido.
Muchas gracias.

Continúa y termina en A-Foros II

En recuerdo al foro Notetrago.com y a los foreros que lo hicimos (im) posible.